SI MEDIANTE CIRUGIA UN TROZO DE TEJIDO VIVO SE EXTIRPA DE UN ANIMAL Y SE INJERTA EN OTRO DE LA MISMA ESPECIE, SUELE SOBREVIVIR SOLO UNOS CUANTOS DIAS, HASTA LO QUE DESTRUYE EL RECEPTOR. EL HECHO ES MUY IMPORTANTE, NO TANTO POR LAS DIFICULTADES QUE PLANTEA PARA EL CIRUJANO DEDICADO A LOS INJERTOS, SINO PORQUE REFLEJA LA CAPACIDAD DEL ORGANISMO ANIMAL PARA RECONOCER Y DESTRUIR TODA SUBSTANCIA CONSIDERADA COMO EXTRAÑA